sábado, 18 de abril de 2009

¡Gracias!

Amigas y amigos:
Después del 28 de marzo, del 70 aniversario del inicio de la ocupación de Madrid por las tropas franquistas que terminó por convertir a España en un gigantesco campo de concentración, donde los poderosos encerraron, fusilaron, torturaron, vejaron y expoliaron a quienes consideraron sus súbditos, sus esclavos y la carne de cañón de sus ambiciones, teníamos en deuda aún agradeceros vuestro apoyo y participación, así como compartir el orgullo de la sencillez y sinceridad de nuestro compromiso.
Por desgracia, mientras recordamos juntos los crímenes impunes que descabezaron a nuestras familias y el progreso en libertad de un pueblo envidiable, hemos tenido que convivir con el presente más cruel, el que acaba de golpe y sin aviso con la vida de las víctimas supervivientes, de quienes portaban el legado del sufrimiento y el perdón y ya no esperaban ni las gracias por haber resistido a tanta barbarie, pero si un lugar donde llevar unas flores frescas a los suyos.
No tienen “carta de capilla”, pero gracias a ellas y a ellos, podemos sentirnos orgullosos de nuestros familiares y amigos e implacables con quienes, desde las instituciones denominadas democráticas, nos niegan la historia, la dignidad, la memoria y la justicia.
Esas madres, padres, tíos, abuelos…compartirán siempre nuestro recuerdo y agradecimiento junto con todos los represaliados por defender la libertad, el futuro y la razón del ser humano.
No queremos dejar de agradecer la entrega, la amistad y las ideas de quienes os habéis implicado de corazón en esta tarea. Siempre nos queda la sensación de no haber podido estirar el tiempo para estrechar más los abrazos. El consuelo, aunque poco optimista, es el de siempre: la lucha es larga y nos veremos de nuevo.
Gracias a los que vinisteis de lejos en los tiempos que corren, a los que estabais cerca y aún así acudisteis. A todos los que no dudasteis en prestar vuestra mañana soleada de sábado para arrancarnos de cuajo la emoción y llevarla por aire, mar y prensa hasta la tertulia infinita de nuestros entrañables republicanos asesinados.
No queremos citar vuestros nombres porque hace ya tiempo son también nuestros. Pero sí desearos salud y coincidencia. ¡Aquí seguiremos, compañeros!¡Hasta la próxima!

2 comentarios:

SaiZa dijo...

Desde luego dices que vida más injusta, porque siempre nos toca sufrir a los mismos y nos quitan lo más necesario, no es justo siempre se llevan a los mejores. Pero me equivocada porque nos dejan su legado y su infinita bondad, la cual siempre nos queda y nos enseñan más si cabe con su partida, a tener fuerzas para seguir adelante por ellos, porque aun sabiendo de su partida siguen luchando y aportándonos su infinita sonrisa, fuerza y bondad. Lo siento estoy muy emocionada. Gracias a vosotros por vuestro compromiso y humildad. Un beso

MarPita dijo...

Pasé por aquí a dejar unas palabras como flores para las víctimas del franquismo.